lunes, 23 de diciembre de 2013

La repentina “evolución” de la Mano Humana

La llamada evolución humana está recibiendo en el ultimo semestre de este año unos reveses bastante severos, recientemente se supo que el genoma más antiguo fue descodificado en Atapuerca, España, pero que sorprendentemente estaba emparentado con otros humanos de Denisova (Siberia). El ADN del neandertal de Atapuerca está datado en 400.000 años, ¿pero si es el más antiguo, como está emparentado con otros hominidos geográficamente tan separados?

Bueno, ahora lo que vemos por la noticia es que otro milagro sucedió hace ,1,4 M.a Resulta que un mono sufrió una mutación y de golpe desarrolló un apófisis estiloide.

Carol Ward la lumbrera que ha hecho este estudio lo justifica de la siguiente manera, [Énfasis añadido por este artículo]

“Con este descubrimiento estamos completando la historia evolutiva de la mano humana. [Hasta ahora solo había manos de mono, el australopiteco era un orangután]Puede ser que no sea esta la primera aparición de la mano humana moderna, pero creemos que está cerca del origen[“puede”, “creemos”, lenguaje especulativo pseudocientífico para insinuar si es humana o no], dado que no observamos esta anatomía en fósiles humanos de más de 1,8 millones de años de antigüedad”[¿y los huesos intermedios del mono al humano?], añadió la investigadora.

“Nuestras diestras manos especializadas han estado con nosotros la mayor parte de la historia evolutiva de nuestro género, Homo. Son, y lo han sido por casi 1,5 millones de años, fundamentales para nuestra supervivencia [y antes]“,

La mano humana es un intrincado puzzle de huesos, con solo una posible configuración correcta, como el cubo de Rubrik.

Para hacernos una idea del cambio que propone este hallazgo es menester contemplar, que cualquier cambio aislado en un hueso por una mutación, aunque fuera certero, necesitaría de varias mutaciones positivas por accidente en el resto de huesos que conforman la mano, siendo estos al menos el Hueso Grande, trapezoide, huesos metacarpianos y Ganchoso. Dicho de otro modo, dado que el esqueleto del ser humano es un sistema complejo en sí mismo, se tuvieron que dar a la vez al menos cuatro mutaciones positivas. Cosa probabilísticamente imposible, a) ya que hoy en día vemos que todas las mutaciones son negativas, derivando en enfermedades. b) El registro fósil no muestra menos humanas en transición, del orangután australopiteco pasamos a la mano humana.


Ningún mono posee un dedo pulgar prensil. Esa articulación no pudo generarse por accidente.

Cabe mencionar también que se pasa por alto la supuesta evolución del pulgar humano prensil, que los monos no poseen. Si sumamos todas las mutaciones de la mano en su conjunto, y vemos las milagrosas mutaciones que se han tenido que producir para pasar de ser mano a mano humana, vemos que no hay tiempo suficiente para tal hazaña, generada por accidente, por un fruto del azar, algo tan intrincado como la mano humana.

Por otro lado las uñas de los monos no crecen de forma continua, sino que cuando alcanzan cierta longitud el proceso de crecimiento se detiene, si no obviamente los monos tendrían unas de más de un metro de largo. El ser humano sin embargo posee unas uñas que siempre crecen.


La evolución humana en general y la de la mano en partícular no cuenta con el tiempo requerido en el escenario evolucionista graduado. Con cada hallazgo los evolucionistas están más acorralados. ¡Se os acaba el chollo!

La evolución completa humana se debió dar en 100.000 años, esa es la conclusión a la que se puede llegar, con la datación de este hueso. A pesar de que la teoría de la evolución humana nos dice que se requieren millones de años para un cambio, cono el homo sapiens la teoría les está saliendo rana, el homo erectos se junta con el homo hábilis, coexistió con él, por tanto no evolucionó a partir de él. ´

¿Aparecerá el eslabón perdido de la mano? ¡Esperad sentados evolucionistas!



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